|DIMES Y DIRETES| Sectores políticos de Salta anuncian una militancia por la abstención para las próximas elecciones

SALTA El armado electoral que se produjo con vista a las elecciones del próximo día 15 de agosto en Salta, dejó muchos heridos en el camino. Muchos militantes vieron frustradas sus intenciones de participar porque se produjo una suerte de “poda” de listas en varios sectores y en varios distritos.

De resultas de ese condicionamiento es que quedaron muchas ansias insatisfechas y esfuerzos desperdigados que ahora, lo mismo que las bolitas de mercurio, parecieran haberse comenzado a reunir.

El sector más acaudalado en cuanto a militantes que se estarían sumando a esta propuesta de abstención, como corresponde, es el radicalismo “disidente”, aquellos que no comparten la línea oficialista impuesta por Miguel Nanni, muchos de los cuales en una jugada artera fueron suspendidos, curiosamente hasta el 2023 y otros echados directamente. En su afán de aplicar una purga propia del stalisnismo, hay que recordar que la gente de Nanni llegó a suspender a un conspicuo dirigente ya fallecido.

Estos dirigentes, muchos de ellos notables caudillos de municipios del interior de la provincia, exhumando una práctica histórica del radicalismo estarían proponiendo la abstención, predicando la no asistencia a votar el próximo 15 de agosto, en razón de que coinciden ni con el procedimiento preelectoral ni con los candidatos propuestos que “son otra vez los mismos”.

Según pudo saberse la convocatoria es amplia y ya estarían comprometiendo su apoyo sectores del justicialismo y de otras fuerzas así como dirigentes que hasta ahora militaron en el oficialismo.

Queda muy poco tiempo para trazar una confabulación semejante, pero de todas maneras el hecho de que se haya filtrado que existen estas conversaciones tiene que constituir un llamado de atención para la gestión gobernante, sobre todo y habida cuenta de que prácticamente todos esos sectores trabajaron en su momento para el triunfo de Gustavo Sáenz. ¿Qué pasó entonces?